domingo, 16 de septiembre de 2007

Confesiones de un opiómano inglés


"En algún lugar, no sé dónde, de alguna manera, no sé cómo, unos seres, no sé cuáles, libraban una batalla, un combate, una agonía que se desarrollaba como un gran drama o una composición musical; mi inquietud era tanto más difícil de soportar, puesto que ignoraba el sitio, la causa, la naturaleza, el posible resultado de la lucha. Como suele ocurrir en los sueños en los que por necesidad nos volvemos el centro de todo movimiento, yo tenía y no tenía poder para decidir el combate."

Thomas De Quincey